Ciutadà de segona a Mallorca
El català és japonès a Ondara
Sandra Alentado, una botiguera d'un centre comercial es va dirigir en valencià a Ondara, La Marina Alta, a un matrimoni madrileny. La resposta que es va endur la noia va ser sorprenent i va iniciar una discussió: “Mira bonita, si me hablas en japonés no te voy a entender nunca”. La noia va replicar, en castellà, que era valencià i també era llengua oficial al País Valencià. “Mira chica, que a mí me da igual como hables tú en tu casa, pero tú tienes obligación de atenderme a mí en español y punto y si no te gusta que te hablen así, te lo piensas antes de faltarnos el respeto”.
Davant la manca de sensibilitat del matrimoni madrileny, la Sandra va intentar explicar-se sense èxit, i així li van tornar a respondre: “Tu lengua no tiene por qué ser otra que no sea el español, que para eso estamos en España, y si no te gusta te vas y trabajas en otro país y aprendes a hablar en su propio idioma”.